Leía yo el artículo que Betty ( esa mujer obsesionada por lucir la camiseta de los que están en contra de lo que los argentinos defendemos y sentimos como nuestro)publicaba en el diario de los Mitre.
Y a esta altura de los acontecimientos yo personalmente no se si reirme de esta anciana que parece querer terminar sus días interponiéndose a todo lo que provenga del sentimiento genuino que tenemos por lo nuestro o si dejarla ahí en ese rinconcito que los gorilas le han dado para que se coma las últimas bananas del bananero.
Porque parece ser que Betty no se da cuenta o no toma conciencia que está en un tiempo de su existencia en que antes que andar jodiendo con sus consabidas y trilladas confrontaciones a todo lo que signifique argentinidad, apego a la cultura, hermandad de sentimientos le ha llegado el momento de tomar las agujas de tejer y si tiene descendencia realizar artesanías manuales para sus nietos .
Que no es bajarla de su pedestal de intelectual sino acomodarla en un escalón de igualdad al de todas las mujeres que teniendo la edad que tiene aportan experiencia, consejos, orientaciones y dejan de lado los rencores y resentimientos que otros tiempos de militancia le han dejado en ese su corazón que parece tallado en piedra al igual que su rostro.
Llegar a la vejez para ser una vieja con cara de culo debe ser tristísimo.
Y no querer aceptar que se le pasó el tiempo, que le llegó la hora del descanso, de la meditación y del goce de los goces que la vida le ofrece a las mujeres de su edad, no solo es lamentable sino que resulta ridículo y hasta bochornoso.
Entregate Betty, fuiste, estás fuera del ruedo y corrés serio peligro de que el toro te clave la cornamenta y te saquen como a una torera que se clavó las banderillas en lugar de clavárselas al toro....que resulta su enemigo o al menos su desafío.
¿Alguna vez viste un partido de futbol? ¿Compartiste los tablones de la popular para aguantarte el meo que te largan los de arriba cuando por esas desgracias tu equipo del alma resulta vapuleado y los goles le llenan la canasta como vos con tus escritos nos llenas la canasta de la paciencia a los argentinos de buena voluntad que habitan este suelo?
¿Tomaste entre tus manos un palo de hockey para sentir el vibrar de tu corazón si lográs vencer al oponente?
Por lo que tus artículos informan a los habituales lectores del diario gorila y de los que te leemos para reirnos un poco(de algo que hay que reirse vieja)no has experimentado la alegría que se siente al gritar un gol, abrazarte con el tipo que tenés al lado, aplaudir a rabiar si las leonas se mandan una portentosa jugada.
Si lo hubieras vivenciado no escribirías boludeces ni vendrías a mandarte la parte de observadora “intelectual” de una goleada de domingo que no tiene vergüenza de tildar de mediocres a los que se ponen la camiseta nacional y gritan a rabiar los goles de Argentina.
Brotes locales de nacionalismo llamás al genuino sentimiento de estar felices de vivir en un suelo que no se doblega ante piratas usurpadores ni le besa el trasero al elefante del rey que hace cornuda a la reina de España.
¿Vivís en un termo?
¿Cómo se te ocurre pensar que no vamos a estar alentando a nuestros atletas durante los próximos Juegos Olímpicos de Londres?
¿Quién lo va a hacer? La reina de la islita en la que viven los ingleses, el principito valiente que se entrena en suelo de Malvinas? ¿El Primer ministro que nos putea en su idioma y tiene la osadía de amenazarnos?
¿Qué tiene de malo que nos entrenemos en suelo argentino para patearles el culo a los piratas ingleses a los que les rendís una obsecuencia que pondría colorado hasta al más obsecuente de los obsecuentes.
Betty, somos transgresores, siempre lo hemos sido.
¿Te acordás que durante las invasiones inglesas nuestros patriotas se entrenaron en suelo argentino para freír con aceite a los ingleses oportunistas que se querían quedar con nuestro suelo?
Los argentinos no nos sentimos excepcionales, lo somos.
Y estás equivocada con tu concepto de “Vale todo”
En todo caso vieja, si jugás al truco sabés que si querés truco tendrás que prepararte para el retruco.
Salí del termo, cambiá esa cara de orto y viví la alegría de sentir como siente el pueblo.
Gritá los goles , aplaudí a las leonas y después entonces podrás escribir con fundamentos .
Hasta la Victoria Siempre
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