martes, 27 de marzo de 2012

La Comisaría de Adrogué fue señalizada....descansen en paz compañeros



Remendando las heridas

(Finalmente el 26 de marzo de 2012 señalizaron la Comisaría de Adrogué)

Me llegó la noticia traída por el viento del pueblo, por la voz de mi hija y por las voces de compañeros de militancia.
Señalan la Comisaría susurraba el viento, señalan la Comisaría repetía mi hija y también mis compañeros.
Todo en derredor era silencio.
No había carteles que anunciaban la noticia.
No había afiches como los afiches que mostraban a Borges en el pueblo o al tenor español en imagen estática en la estación de trenes, en las paredes , en las vidrieras y en todo lugar visible al caminante de las calles empedradas de mi pueblo.
No había propaganda que hiciera saber a los vecinos que al fin tras tanto tiempo se señalaba la Comisaría asesina .
En silencio , como en el silencio de la noche en la que hace tiempo eran secuestrados los jóvenes de entonces, en silencio se trató de guardar la noticia cara al sentimiento militante de los que habíamos pasado por los pozos.
Pero el viento de mi pueblo es un viento que transgrede los silencios y se vuelve huracán que sacude las conciencias dormidas .
Entonces sucedió.
Me enteré que el 26 de marzo a las 11 de la mañana señalizarían la Comisaría asesina
Que al fin tras tanto tiempo el paseante, el caminante, el vecino, el visitante sabrían que allí en el 76 y en el 77 había funcionado un Centro Clandestino.
Y así como se desgrana cada nota, cada sonido del Andante Spianato OP 22 de F.Chopin sobre los recuerdos que me acercan voces no olvidadas, reuniones bajo los eucaliptos del pueblo, besos al anochecer entre las luces de las farolas de la plaza del Almirante, así fluyen mis recuerdos
Y fluyen mis pensamientos como imanes atrayendo cada momento vivido con los que un día fueron mis compañeros y compañeras de ruta y a los que nunca jamás volví a ver porque (como me decía el Turco) se quedaron esperando en una esquina de la vida y no encuentran el camino de regreso.
Pero, sucedió entonces que con el viento de otoño el silencio que escondía la noticia se hizo canción en la tarde y dejó escrito en mi ventana que el 26 a las once la Comisaría asesina sería por fin señalada.
No importó que a escondidas casi sin que nadie lo supiera varios de los que nos enteramos fuéramos a la Comisaría.
Y allí después de tanto tiempo y después de tanta lucha y de tanta resistencia a ese sentimiento que se llama olvido la Comisaría de Adrogué fue señalada.
Para el paseante, para el vecino, para el caminante una placa en la puerta del que fuera el más cruel y sanguinario de los Centros de Detención Clandestina quedó a la vista.
En silencio, como en el silencio que una noche se llevó a mis compañeros se trató de esconder la noticia.
Pero el viento de mi pueblo es un viento subversivo y vino a buscarme a mi casa y allí estuve para dar rienda suelta a mi llanto y remendar mis heridas.
Descansan en paz mis compañeros , estoy ahora segura.
Y también estoy segura que algún día volveremos a encontrarnos.
Mientras tanto los espero.
Mientras tanto

Hasta la Victoria Siempre

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