Fernando Laborda, periodista del diario de los Mitre ha vuelto a practicar su deporte favorito
Se
preguntarán:¿Qué deporte?
El deporte de ensañarse con las mujeres .
Un deporte conocido con el nombre de acoso.
Y lo practica a la perfección, meticulosamente ,como bordan
las monjas de clausura los
manteles que el cura guarda en la Sacristía para, oportunamente ser usados
en la celebración de la misa en
la que pedirá perdón a Dios por los
pecados cometidos en el ejercicio de su ministerio .
El pecado con el que más se los relaciona es el pecado de pedofilia.
Volviendo a Laborda, (no al bordado de las monjas), no es
casual , según mi parecer que el mencionado cargue con virulencia contra una
mujer a la que le debe respeto.
Esto no solo por su condición de mujer sino porque además esta
mujer es quien preside y administra un País
por voluntad del 54% de la población del mismo País que habita Laborda.
Laborda, no las monjas que bordan(aclaremos para evitar
confusiones)
La estrategia de este periodista acosador es inventar lo que se le ocurre para desprestigiarla, y
en su afán por demolerla con sus mendacidades no se percata que cae en el
ridículo criticando dichos y
expresiones que la mujer que gobierna expresa en el mejor lunfardo .
Que yo sepa, el uso del lunfardo está garantizado por la
libertad de expresión que todo ciudadano tiene en este País llamado Argentina y
que yo sepa la mujer que gobierna es una ciudadana de este País, en realidad es
la Primera Ciudadana y nos representa a todas las mujeres.
Ergo, quien la ataca, ataca nuestro género, quien la acosa,
acosa nuestro género, quien la desprestigia, nos desprestigia, quien la humilla
nos humilla.
Al igual que el vago de Mauricio Macri que se rasca el ombligo
en lugar de gobernar y se muestra en paños menores sin tener en cuenta que tal situación podría caratularlo como
exhibicionista, Fernando Laborda(no las monjas que bordan) cae en su propia
trampa porque por defender al holgazán
de Macri se asemeja a la Gata Flora.
¿Quién es la Gata Flora?
No es mi gata, mi gata se llama Angélica.
La Gata Flora es una gata a la que todo le molesta, a la que
nada le viene bien.
De lo expuesto podría inferirse que Fernando Laborda es como la Gata Flora?
Saquen sus conclusiones, sacar conclusiones no está prohibido.
Pero, por que Fernando Laborda(no las monjas que bordan)
procede así?
¿Qué lo induce a despotricar, defenestrar, ridiculizar todo lo
que la mujer a la que acosa realiza, dice, practica , expone o simplemente
expresa?
¿Qué lo lleva a sentir que puede meterse en el pensamiento de la mujer que nos gobierna y
avasallarla hasta en su más íntima intimidad como lo es el pensamiento de un
ser humano?
Se rumorea que estaría influenciado por “La López Rega” una
agrupación que intenta competir con otras agrupaciones de jóvenes militantes
En fin, para finiquitarla porque se hace lunga.
Fernando Laborda(no las monjas que bordan) ha vuelto a practicar su deporte favorito.
El deporte conocido con el nombre de acoso.
Hay que estar atentos porque los acosadores no dejan de molestar a la víctima e insisten
en cometer acciones que están tipificadas
como delitos.
No quiero decir que Fernando Laborda es un delincuente, quien
así lo interprete está equivocado.
Pero, por las evidencias
plasmadas en lo que escribe cada cual y cada quien puede inferir lo que
se le venga en ganas respecto de la actitud de Fernando Laborda(no las monjas
que bordan)y así como él se explaya minuciosamente destripando a su víctima
predilecta(que por otra parte es la víctima predilecta del diario de los Mitre)
cada uno de nosotros puede tratar de calmar su sed de rencor, resentimiento y
obsesión malsana llamándolo a la reflexión
para que haga un alto en el camino y bajando los decibeles se asemeje
más a un periodista y menos a un chimentero de los que se ganan la vida
hurgando en las vidas de sus semejantes y acosando mujeres.
Hasta la Victoria Siempre
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