Y pretende (tal vez porque presagia que su estrella se está opacando) confundir desde su leguleya a los desprevenidos que aún siguen dando credibilidad a su verso deformado de una realidad que solo es su realidad.
Una realidad alejada de la cotidiana que le toca vivir a cada terrestre mortal que habita este suelo, que es Nación y que es Estado y que Mariano Grondona intenta tergiversar en sus conceptos acudiendo para ello a pensadores a los que utiliza para manifestar las cosas que su mente retorcida intenta imponer como verdad única e irrebatible.
Esto es que esta Nación y que este Estado no son ni una Nación ni un Estado.
Entonces, y como decía al comenzar este artículo vuelve a orinar fuera del tacho malinterpretando el mensaje enviado desde Villa Sodati.
Lo que nos llega desde Villa Soldati es un mensaje que rechaza enérgicamente la xenofobia y a los xenófobos que como Mauricio Macri incitaron(a mi opinión) al enfrentamiento entre ciudadanos habitantes de un mismo suelo al catalogar a los mismos como delincuentes, drogadictos, mafiosos y toda la sarta de términos discriminatorios que pusieron a los pobres en una situación de riesgo y vulnerabilidad como así también a vecinos bolivianos y paraguayos como sobrantes de una inmigración descontrolada capaces de generar lo que su inoperancia y su falta de idoneidad para desempeñar el cargo produjeron entre los seres humanos que habían ocupado el parque Indoamericano.
Claro está.
Mariano Grondona había sido hace poco uno de los invitados a la fiesta del casorio del Jefe de Gobierno con la mujer cuya Empresa se nutre y alimenta justamente de ciudadanos indocumentados a los que reduce a la esclavitud para sacar con el trabajo de los mismos ventajosas y jugosas ganancias para sus bolsillos.
Mariano Grondona olvidó en su artículo mencionar que los negreros y las negreras que habitan esta Nación y este Estado (en el que vivimos los argentinos que ha dejado atrás la represión y las metodologías que sus amigos los milicos dictadores a los que les lamía el culo para sobrevivir a costa de nuestras muertes y nuestras torturas)son los que distorsionan el sentido de Nación y el sentido de Estado alterando el órden de la convivencia respetuosa ,que debe darse entre empleador y empleado.
Para terminar, que el mencionado periodista se atreva a hablar del período 1976 y no se le caiga la cara de vergüenza o se le doblen los dedos de la mano que sostiene la pluma con la que deforma la realidad de los hechos y los mensajes, ya es colmo de los colmos.
Pero,:¿qué se puede esperar de un intolerante, amigos de xenófobos y de asesinos genocidas a los que en el pasado reciente sirviera como el mejor y más sumiso sirviente y a los que en el presente encubre disfrazando los hechos que realizan y que no son otra cosa más que actos de discriminación e intolerancia hacia todo aquél que provenga de tierras vecinas.
Del Preámbulo de nuestra Constitución mutis por el foro al igual que de los Pactos y del pasado inmigratorio que trajera a nuestra tierra por ejemplo a los miembros de la familia MACRI que provenientes de Italia llegaron a este suelo a hacerse la América
Un suelo que para este chantún llamado Mariano Grondona, no es ni una Nación ni un Estado.
Hasta la Victoria Siempre.
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