El pobre viejo se las cree a tal punto de suponerse el dueño de todos los saberes.
Lástima que no se crea o no se sienta el dueño de un pasado que lo condena , lo persigue y los señala como un colaboracionista de las dictaduras .
En la Francia de la Segunda Guerra Mundial, los colaboracionistas eran simplemente fusilados
A su manera los franceses condenaban la deshonra como suelen condenarla los pueblos que ,habiendo sufrido la invasión de sus tierras y el sojuzgamiento de sus ciudadanos por poderes extranjeros intentaban ver en sus actos o tal vez traducir en sus actos el asco y la repugnancia que tales personajes les producía.
Porque en cualquier lugar del mundo y en cualquier civilización , un colaboracionista es tal solo eso: escoria, lacra , materia fecal, desperdicio humano.
Francia tenía para las mujeres colaboracionistas un castigo demoledor.
Simplemente les rapaban las cabezas y las paseaban por las calles portando letreros que denunciaban su condición de tal.
Tan solo lo ocurrido en Europa con quienes se prestaban a la traición de sus conciudadanos y de la Patria.
Pero en este País Argentina no sucede lo mismo.
Los colaboracionistas(hombres y mujeres ) que colaboraron con las dictaduras que asolaron al país siguen como si nada.
Es más no solo les dan espacio Medios de Comunicación conocidos sino que hasta se dan el lujo de ser ellos los que desprecian a los ciudadanos honestos.
Y se vanaglorian y hasta se permiten criticar a quienes legalmente elegidos por la población dedican su tiempo al trabajo de trabajar por el bienestar común y por la igualdad y por la justicia.
Y como si fuera poco, como si ser colaboracionistas de la dictadura más que un oprobio fuera un don divino otorgado por un Dios Omnipotente que al parecer todo lo puede menos hacerles sentir la vergüenza de haber entregado a sus compañeros de ruta y de haber mirado para otro lado mientras la patria era ahogada en sangre, practican desde la impunidad la impudicia de ofender a quienes (como en el caso de la juventud argentina) ha dado muestras de volver a renacer de las cenizas militando y alentando proyectos y sueños que de seguro llevarán a la práctica aún a contrapelo de ser comparados por este desfachatado con la juventud Hitleriana.
Esto simplemente porque este viejo cegatón se ha pasado de listo y haciéndose el canchero continúa con su violencia y con su agresividad hacia quienes en la década del 70 lo despreciaron como lo desprecian actualmente quienes lo van conociendo en sus manifestaciones autoritarias, acosadoras, denigrantes y ofensivas.
El vejete se las cree y le da a la pluma para tal vez tapar con palabras su conciencia sucia .
Tan sucia y tan negra que no creo que ni el Papa Benedicto pueda poder perdonarle los muchos y cobardes pecados cometidos contra sus hermanos.
La militancia juvenil ha regresado.
Y le estamos causando el mayor de los daños que este renegado de la especie podía esperar.
No te hagás el canchero
Hemos vuelto
Y somos millones.
Hasta la Victoria Siempre
Ni un paso atrás
AMÉN
Y se vanaglorian y hasta se permiten criticar a quienes legalmente elegidos por la población dedican su tiempo al trabajo de trabajar por el bienestar común y por la igualdad y por la justicia.
Y como si fuera poco, como si ser colaboracionistas de la dictadura más que un oprobio fuera un don divino otorgado por un Dios Omnipotente que al parecer todo lo puede menos hacerles sentir la vergüenza de haber entregado a sus compañeros de ruta y de haber mirado para otro lado mientras la patria era ahogada en sangre, practican desde la impunidad la impudicia de ofender a quienes (como en el caso de la juventud argentina) ha dado muestras de volver a renacer de las cenizas militando y alentando proyectos y sueños que de seguro llevarán a la práctica aún a contrapelo de ser comparados por este desfachatado con la juventud Hitleriana.
Esto simplemente porque este viejo cegatón se ha pasado de listo y haciéndose el canchero continúa con su violencia y con su agresividad hacia quienes en la década del 70 lo despreciaron como lo desprecian actualmente quienes lo van conociendo en sus manifestaciones autoritarias, acosadoras, denigrantes y ofensivas.
El vejete se las cree y le da a la pluma para tal vez tapar con palabras su conciencia sucia .
Tan sucia y tan negra que no creo que ni el Papa Benedicto pueda poder perdonarle los muchos y cobardes pecados cometidos contra sus hermanos.
La militancia juvenil ha regresado.
Y le estamos causando el mayor de los daños que este renegado de la especie podía esperar.
No te hagás el canchero
Hemos vuelto
Y somos millones.
Hasta la Victoria Siempre
Ni un paso atrás
AMÉN
Perdón que ponga "Anónimo". No lo soy. Sólo me llevo mal con la tecnología. Me llamo Mariano Varela (BAIVAM@techint.net). Sólo quería dar una reflexión, chiquita. Parto de una breve hipótesis imposible: la presunción de cierta
ResponderEliminar"inocencia" de parte de Grondona. Supongamos que sólo es un gorila que siga los mandatos de su (odio de) clase: limitado a esa tontería, su ponencia y su perfil adquirirían no tanto honradez sino cierta coherencia. Es decir, un Manfred Schönfeld, no? -por ejemplo-. Pero se cae al toque: Schönfeld tomaba información de la oficina de prensa de Harguindeguy. Y sólo alguien muy zombie, muy estúpido, con cierta inocencia infantil a lo Borges, podía tomar esa fuente como honrada y fidedigna. Mariano Grondona tiene bastante de su perversidad más allá de su asquerosidad gorila, con sólo dos botones de muestra: 1974, su "Meditación del Favorito" acerca de López Rega. Parecería un comentario de Robert Graves, y en la piel de Claudio el Emperador: la cultura romana como reducción a la charla entre dos prostitutas ancianas, buscando el sonido perdido entre un pedo y un eructo, o la grafía oculta dada por un gargajo de flema. Segundo botón: Grondona fue "secuestrado" por el grupo de tareas de Orletti, junto a su señora. El tema: el aviso mafioso a la Iglesia por los Palotinos. Y fue llevado a ese portal del averno: vio y sabía, como supo. No puede hacerse el sorprendido en su buena fe; de ignorar los métodos aplicados para que los amores de sus políticas puedan llevarse a cabo sobre toda la población, el país entero. Es y fue consciente: y quien se calla, otorga. Más aún al negar. No avala por ignorancia autoinfligida, como la gran clase media procesista que se subió al Titanic de la Dictadura y luego al del menemato, para poner a De la Rúa después o "asquearse" con el "que se vayan todos". La gran mayoría votó por el fraude del Pacto de Olivos. Pero Grondona supo el transfondo real de la cocina. Y se calló.