ROLANDO HANGLIN....que haga de su culo un pito

(Pero que no nos ponga a todas las mujeres en la misma bolsa de mierda)

Alguna vez y refieriéndose al periodismo mundial ( al que empezaba a caerle la ficha sobre lo que estaba ocurriendo en nuestro País respecto de la dictadura, los secuestros, los asesinatos), alguna vez refieriéndose a los mismos ,lo hizo con ese desprecio al otro, o con esa ironía perversa que suele caracterizarlo llamándolos como “Los que patean contra el mundial”.
El tipo es así, se cree el dueño de todas las verdades y como se largó en pelotas a caminar por el mundo exponiendo sus partes pudendas como si tal cosa fuera un ejemplo que todos los mortales debían imitar así procedió con sus compañeros de tarea periodística.
Sin darse cuenta o sin entender que los únicos que pateaban contra el mundial eran los genocidas y sus lameculos que pretendían ocultar con un triunfo del equipo argentino la desaparición de deportistas que no pudieron presentarse en la cancha porque estaban prisioneros en centros clandestinos o simplemente desaparecidos .
Y si no fuera porque anduvo mostrando las bolas y el trasero (es mi parecer que nadie lo registraría)
Porque solo a un tipo que necesita ser tenido en cuenta y tener prensa se le ocurriría andar enseñando el culo, el pene, la barriga y el ombligo escudándose tras la bandera del nudismo.
Allá el y los que así quieren manifestarse y allá el y los que desean exponerse al sol sin el freno inhibitorio que justamente nos marca los límites de la privacidad que son características del Homo Sapiens.
Habría que preguntarle a Bergoglio que piensa al respecto.
Podría así dar rienda suelta a su prédica y dejarnos de joder con los temas habituales en sus discursos de los que escapan los actos corruptos de los corruptos o los actos perversos de los perversos.
Empezando por muchos de los que llevan sotanas.
Pero bueno, si me refiero a este tipo que ni siquiera usa taparrabo a la manera del Tarzán de la Selva es que quiero que al menos sepa que podrá escribir boludeces y sentir que las mismas lo coronan como el GRAN MACHO ARGENTINO.

Pero aún existimos mujeres que creemos en el diálogo entre miembros de los distintos sexos
Mujeres que pensamos con la cabeza y no con los instintos

Mujeres que tenemos pensamientos y conocimientos que nos llevan a concluir que una trompada, una piña, un tortazo son manifestaciones externas de la agresión .

Porque el agresivo, el golpeador es un incapaz de controlar sus impulsos lo que lo conduce a propinar una paliza al otro

Al que considera inferior desvalorizándolo con los golpes y humillándolo
Y que los hombres, los que tal vez se tapen las bolas y el pene y no anden mostrando en culo por la calle son tan hombres o tal vez más hombres al hacerse respetar como tales y rechazar y repudiar la violencia como forma de trato habitual entre seres que se dicen humanos.

Un piña de una mujer a un hombre es una AGRESIÓN.
Que no venga a disminuir al sexo femenino por no tener la musculatura acorde a la que el imagina necesaria para agredir, lastimar y hasta producir la muerte por medio de un puñetazo
Como el propinado por la diputada Camaño a su compañero de trabajo en plena legislatura.
No todos los hombres se prestan a ser tratados a los golpes y no todos los hombres han recibido alguna vez una piña por parte de las mujeres con las que se relacionan en los variados vínculos que suelen entrelazar a hombres y representantes del género femenino
Hombres como él tal vez acepten el castigo y la humillación como forma de ver la relación entre personas desde la vereda de la enfermedad.

O tal vez sea la costumbre a la que lo habitúan las mujeres con las que traba relación.
Y habría que preguntarse el porque de semejante falta de predisposición para dialogar (y mirar las situaciones cotidianas a las que nos enfrenta la vida) desde la plataforma de la armonía y comprensión que seguramente son espacios que se hallan desposeídos de la brutalidad que vimos exponer en el ring del Congreso de la Nación.
Insisto, no todas las mujeres nos manejamos a los golpes, a las piñas, a las trompadas.
Muchas mujeres sabemos controlar nuestros impulsos y sabemos caminar otros caminos alejados de la violencia.
Si no fuera así, cada una de las que sobrevivimos a la tortura, a los secuestros a las violaciones deberíamos(según lo que expone este señor en el artículo que escribe para el diario La Nación)
devolver a los genocidas patadas en el culo, trompadas en los testículos y toda la gama de variados instrumentos puestos en práctica por la PUGILISTA diputada Graciela Camaño.
Y consentidas por sus pares de la oposición y por la chupacirio en declive político Elisa María Avelina Carrió una gorda adepta a los malos tratos, a las devalorizaciones y a las piñas (como bien lo celebra a través de los medios que aún le siguen lamiendo el ombligo.)
Puesta las cosas en su lugar, que el tal Rolando Hanglinse siga mostrándose en bolas, que siga con sus perversiones, que se manifieste y exprese como un machista o que haga de su culo un pito.
Allá él pero que no nos ponga a todas las mujeres dentro de la misma bolsa de mierda.
Por si no le quedó claro.


Hasta la Victoria Siempre