(Si el finado se levantara de la tumba¿ seguro que le pateaba el trasero?)
No se....estoy dudando
Porque justificar la violencia, justificar que un ser humano golpee a otro ser humano es ser también un violento.
Comprender la Violencia como una REACCIÓN HUMANA es tan repugnante como ser un golpeador
Justificar la violencia (venga de quien venga y provenga de donde provenga) es hermanarse con aquellos que hicieron de la VIOLENCIA un instrumento para desaparecer al otro.
Al que pensaba distinto, al que protestaba, al que era encarcelado clandestinamente, al que era secuestrado….
Pero, no solo el hijo de Raúl Ricardo Alfonsín ha salido a profetizar sobre el tema levantando las banderas de la violencia y llevando a la calidad de estropajo esa bandera que levantara su padre y que se constituyó al parecer en un simple verso utilizado en la oratoria para convencer al ciudadano y no para educar a su hijo.
Porque quien es capaz de “COMPRENDER” a una VIOLENTA y ubicar la humillación del golpe en el contexto de una “REACCIÓN HUMANA es un versero, charlatán carente de escrúpulos que se aprovecha del pasado del finado para ubicarse políticamente y ser tenido en cuenta por parte de la ciudadanía
No tiene sentido hablar de los otros indignos que por lamerle el culo a Satanás son capaces no solo de adherir a la VIOLENCIA sino de hacer APOLOGÍA de la misma con lo cual ,en nombre de la violencia y como la VIOLENTA no noqueó a su compañero, o porque la violenta ha dado muestras de idoneidad y aptitud insisto ,en nombre de todos estos infundados fundamentos podemos entonces matar, asesinar, torturar, secuestrar y cometer cualquier acto de barbarie .
Realmente es de no creer que quienes lloraron ante el cadáver de Raúl Ricardo tan abiertamente se hayan manifestado en contra de sus principios.
Porque entonces tal actitud me autoriza a pensar que el muerto predicó en el vacío o como dije anteriormente tan solo fue un charlatán que pudo engatusar con el discurso porque su hijo ni siquiera tomó en cuenta sus palabras y su rechazo respecto de la VIOLENCIA y los VIOLENTOS.
Para finalizar y dar ya por terminado este repugnante proceder de los que adhieren a la violencia deseo recordar a estos defensores de la VIOLENCIA una de las últimas palabras de Raúl Ricardo padre de Ricardo Luis:
“LA POLÍTICA ES DIÁLOGO Y SI NO ES DIÁLOGO ES VIOLENCIA”.
Después de todo lo ocurrido y de lo manifestado por el hijo del muerto creo que tengo todo el derecho del mundo a pensar que simplemente el finado era un charlatán.
Comprender la Violencia como una REACCIÓN HUMANA es tan repugnante como ser un golpeador
Justificar la violencia (venga de quien venga y provenga de donde provenga) es hermanarse con aquellos que hicieron de la VIOLENCIA un instrumento para desaparecer al otro.
Al que pensaba distinto, al que protestaba, al que era encarcelado clandestinamente, al que era secuestrado….
Pero, no solo el hijo de Raúl Ricardo Alfonsín ha salido a profetizar sobre el tema levantando las banderas de la violencia y llevando a la calidad de estropajo esa bandera que levantara su padre y que se constituyó al parecer en un simple verso utilizado en la oratoria para convencer al ciudadano y no para educar a su hijo.
Porque quien es capaz de “COMPRENDER” a una VIOLENTA y ubicar la humillación del golpe en el contexto de una “REACCIÓN HUMANA es un versero, charlatán carente de escrúpulos que se aprovecha del pasado del finado para ubicarse políticamente y ser tenido en cuenta por parte de la ciudadanía
No tiene sentido hablar de los otros indignos que por lamerle el culo a Satanás son capaces no solo de adherir a la VIOLENCIA sino de hacer APOLOGÍA de la misma con lo cual ,en nombre de la violencia y como la VIOLENTA no noqueó a su compañero, o porque la violenta ha dado muestras de idoneidad y aptitud insisto ,en nombre de todos estos infundados fundamentos podemos entonces matar, asesinar, torturar, secuestrar y cometer cualquier acto de barbarie .
Realmente es de no creer que quienes lloraron ante el cadáver de Raúl Ricardo tan abiertamente se hayan manifestado en contra de sus principios.
Porque entonces tal actitud me autoriza a pensar que el muerto predicó en el vacío o como dije anteriormente tan solo fue un charlatán que pudo engatusar con el discurso porque su hijo ni siquiera tomó en cuenta sus palabras y su rechazo respecto de la VIOLENCIA y los VIOLENTOS.
Para finalizar y dar ya por terminado este repugnante proceder de los que adhieren a la violencia deseo recordar a estos defensores de la VIOLENCIA una de las últimas palabras de Raúl Ricardo padre de Ricardo Luis:
“LA POLÍTICA ES DIÁLOGO Y SI NO ES DIÁLOGO ES VIOLENCIA”.
Después de todo lo ocurrido y de lo manifestado por el hijo del muerto creo que tengo todo el derecho del mundo a pensar que simplemente el finado era un charlatán.
Hasta la Victoria Siempre
AMÉN
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