martes, 14 de diciembre de 2010

Rosendo y los inmigrantes


(Para lectores de la Nación Argentina que no practican la xenofobia)

Leía yo al gorila de Rosendo Fraga en un artículo que ,amén de xenófobo, amén de discriminatorio, amén de despectivo, amén de todos los amenes que puedan imaginarse dejaba traslucir un sentimiento de rencor por no decir de odio hacia quienes por ser habitantes de países vecinos se han hecho merecedores por parte de estos resentidos de la estirpe de Rosendo de diversos adjetivos descalificativos de su origen, de su procedencia y por ende de su cultura .
Una cultura con la que al parecer Rosendo Fraga se halla en serio conflicto al no reconocer que en esta tierra la inmigración aportó su cultura enriqueciendo con ella nuestra cultura y entrelazando sus raíces con las nuestras para quedar aferrados al mismo suelo como ciudadanos iguales en derechos y en oportunidades.
No voy a perder mi tiempo en un tipo como Rosendo que al parecer no solo tiene tostada la piel en forma permanente sino que además tal condición la presenta su pequeño y reducido cerebro calcinado tal vez por tanto sol .
Situación que posiblemente lo lleva a creerse con la autoridad moral de ridiculizar a la inmigración para caer en su propia trampa.
Es decir, quedar atrapado en las redes de la ignorancia que lo envían a realizar un viaje hacia el ridículo que resulta ser un viaje con boleto de ida pero sin boleto de regreso.
A estas horas de la noche, (lo escrito por Rosendo en el diario que les besa el trasero a los gorilas y le rinde honores a los genocidas y les lame las botas a los milicos), a estas horas ya ha perdido actualidad y para bien de muchos y para desconsuelo de los que apuestan al fracaso de quien gobierna una vez más hemos logrado vencerlos.
A los Rosendos y a los Marianos y a los Eduardos y a las Lilitas y a las Gabrielas y a toda la colonia de insectos que suelen sobrevolar nuestra tierra casi siempre al finalizar el año.
El conflicto ha culminado.
Se han quedado nuevamente con las ganas de ver el fracaso al que apostaron desde los distintos frentes opositores.
Mauricio Macri con el culo enjabonado ha debido claudicar tras suplicar que no lo dejaran ahogarse en el mar con olas gigantes que amenazaba con asfixiarlo a él y a todo su gabinete.
Ya no tienen con quien pelear , ni competir y saben que están perdidos.
Solo nos resta esperar para que finalmente se vayan como deben irse los aprendices de dictadores que pretenden ser dictadores en un suelo con democracia.
Es decir con el voto popular.
¿Hasta NUNCA MÁS MAURICIO?
Creo que si.
Y bueno, hemos triunfado nuevamente.
Así lo siento.
AMÉN

Hasta la Victoria Siempre

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